Consta de varias salas acondicionadas y decoradas con rigor artístico y cultural según el uso al que estaban destinadas.
En la casa se puede ver una gran cantidad de piezas donadas al Museo por diversas personalidades y organismos públicos, así como de particulares siempre relacionadas con esta cultura.
ZAGUÁN:
En esta habitación grande y abierta se puede observar:
- La cocina, enmarcada en un arco de herradura de ladrillo, decorada con platos típicos y especias varias.
- El aljibe, cavado en roca, tiene 4 metros de profundidad y 3 metros de diámetro; sigue recogiendo el agua de la lluvia a través de canales y filtrándose por capas de arena para potabilizarla y a su paso por la bodega enfría las tinajas, la fruta, etc. El interior del aljibe tiene dos arcos de medio punto que refuerzan el suelo del zaguán.
SALA DE TÉ:
Se accede desde el zaguán a través de un arco de estilo mudéjar granadino, donado por el que fuera director del museo arqueológico de Córdoba.
Decorada con mesa de madera tallada a mano, lava manos, pufs, argilas o pipas de fumar, y diversas teteras, hacían de esta sala el lugar idóneo donde el señor de la casa ofrecía té o leche con dátiles como muestra de la hospitalidad del buen musulmán. En esta sala pueden contemplarse numerosas felicitaciones de diversas personalidades.
SALA DE ARMAS:
Antiguo comedor de la casa, hoy en día refleja las armas utilizadas en la época tales como: dagas, gumias, espindargas, alfanjes, látigos etc. También esta sala acoge un maniquí árabe masculino con ropas típicas.
Se abre al patio por medio de un arco de ladrillo de herradura.
EL PATIO:
Parte fundamental de las casas árabes, refrescan y aromatizan la vivienda con naranjos, jazmines, palmeras, enredaderas y flores. Destaca una hermosa fuente de piedra con dos cabezas de leones.
SALA DE DANZA:
Comunicada con el patio o jardín mediante un gran arco de ladrillo con forma de escenario, de tal manera que el señor de la casa y sus invitados podrían ver danzar a las bailarinas o escuchar música, sentados en el patio.
Esta sala contiene instrumentos de música como guzlas, timbales, flautas… Destaca un gran tapiz con escena de danza típica, donado por una conocida familia cacereña.
HAREM:
Cruzando un arco de medio punto nos encontramos en la sala que junto a la alcoba es la habitación más íntima de la casa.
En ella se encuentra un maniquí de mujer árabe con vestido típico, tapices, alfombras y baúl para ajuar.
La bóveda de esta sala es de doble arco de arista en ladrillo. Resalta la ventana con cristalera que se asoma al patio enmarcada en un hermoso doble arco lobulado de piedra.
ALCOBA:
Cruzando un arco de herradura y subiendo tres peldaños, se accede a la que es, además de la sala más elevada, la más recogida, dando mayor importancia al señor de la casa.
En esta sala destaca una colección de figuras sumerias y asirias (copia de las originales), regalo de la embajada de Irak y traídas desde Bagdad por el Excmo. Sr. Embajador de Irak, como regalo para la inauguración.
BODEGA:
Es la sala más fría de la casa, ya que la recorren los canales de recogida de aguas del aljibe, y está situado encima de éste. Dispone de un rincón de roca preparado para colocar tinajas con aceite, miel, leche, etc. También dispone de un canal de desagüe o limpieza por si se rompía o vertía alguna tinaja.
En ella están expuestos restos, tanto romanos como árabes, de cerámica, tinajas, pesas para hilar, incluso huesos de animales que una vez comidos serían enterrados en el patio.
BAÑO, HAMMAN:
Accedemos al baño a través del pasillo de 8 metros de largo, con preciosa y bien conservada bóveda de cañón.
Está excavado en roca y se accede bajando cuatro escalones.
El baño utilizado, tanto para baños de agua caliente, como baños de vapor, tiene un canal de entrada del vapor que procedía de la sala de calderas, que a la vez servía de desagüe, pudiendo así reciclar el agua. También podía usarse como calefacción, principalmente caldeaba la alcoba situada justo encima. |